Efemérides 1912

Urgando entre los negativos encontré algunos que me parecieron los personajes conocidos,
cuando los digitalicé e invertí, resultó que efectivamente este personaje es Severiano Nava Arcos de 54 años.
La siguiente incognita era determinar la fecha en que se tomaron los mismos.


Cuando en el proceso aparecio mi abuela, hubo otras observaciones que hacer, como por ejemplo que el sillón es el mismo que la anterior foto del abuelo y además que la silla en donde se sentaron los dos personajes era la misma, así como el lugar ya que sobre sus cabezas aparece siempre un objeto decorativo y el calendario, Diega de 48 años.
Al aparecer esta tercera fotografía no me quedó la menor duda de que la secuencia de fotos fue tomada una tras otra, aquí hay algo más que observar y es la mandolina que sostiene el tio Severiano Nava Lojero la cual en la foto del Abuelo Severiano Nava Arcos se encontraba asentada en el sillón (el objeto raro que brilla debajo del codo de la mano izquierda del abuelo) yfinalmente uno de los parámetros que más se busca dentro de las investigaciones son las fechas en las que fueron tomadas las fotografías; esta la logré determinar con la ayuda de una lupa y leyendo el negativo me encontré con la fecha de mayo de 1912; en esta fecha Severiano tenía 21 años.
Esta otra fotografía de la pareja de Diega y Severiano podría jurar que es parte del mismo rollo anterior, solo que en otro espacio de la casa porque Diega tiene la misma blusa de la primera secuencia.
Severiano chico está afuera de un departamento que supongo que era la casa de la familia, observamos un escritorio en el interior de la misma.
Samuel está en el mismo lugar que Severiano chico, además del escritorio observamos un sobrero sobre del mismo y su edad de 19 años.
Carlos en esta foto se encuentra en otro lugar y lo único que podemos apreciar es una como lámpara de buró, su edad de 16 años.
A este chaparrito me lo sentaron en una silla de lona que supongo que era la misma que usaron los personajes anteriores; pero este chaparrito es especial para mi porque es mi padre, Roberto Nava Lojero y su edad era de 9 años.
Finalmente este pequeño cerraría la sesión fotográfica, y es nada menos que Edmundo Nava Lojero, con una edad de 5 años.
En esta foto solo identifico plenamente a mi padre Roberto y probablemente Severiano el de atrás, las mujeres no me son familiares.
La cámara con las que se tomaron las fotos pudo haber pertenecido a Severiano chico ya que mi padre que fué muy aficionado a la fotografía estaba muy chico.